Se cobra el esfuerzo, no la utilidad.
Yo solía ir por el Café BlaBla, sistemáticamente me pedía «una Heineken» (detrás de otra) y sistemáticamente me ponían «mezcladillo». Un día un hombre, que había pedido «una caña» (de Heineken porque no había otra en barril) le preguntó al camarero porqué a mi me ponía «mezcladillo» y a él no (imagino que era cliente […]